Hasta el día 27 de octubre, al menos 41,9 millones de estadounidenses habían votado anticipadamente en los actuales comicios.

El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, acudió a votar de forma anticipada para las elecciones a la Casa Blanca este lunes 28 de octubre. El actual mandatario ejerció su derecho en un centro de votación de Wilmington, Delaware, estado donde reside.

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Al acudir al centro poco antes del mediodía el presidente tenía un centenar de personas por delante, por lo que se sumó a la fila durante varios minutos antes de efectivamente depositar su papeleta, con voto para la candidata demócrata Kamala Harris.

Biden aprovechó esta espera para saludar y conversar con los votantes que se le acercaban. Estaba acompañado por la congresista demócrata Lisa Blunt Rochester, ahora candidata al Senado por Delaware.

Tras ejercer voto, estrechó la mano de algunos votantes y conversó con la prensa así como calificó el mitin de Donald Trump en Nueva York: «Fue simplemente vergonzoso, por debajo de cualquier presidente, pero eso es a lo que nos estamos acostumbrando».

El exmandatario Trump insultó a la vicepresidenta y la llamó «estúpida» y de «bajo coeficiente intelectual».

Kamala Harris, de 60 años, anunció lunes que se someterá a una prueba cognitiva en respuesta al ataque de Trump, de 78 años, y lo retó a que también se someta a dichas pruebas.

En vídeo, el presidente Biden también mencionó que la Casa Blanca está en conversaciones con Egipto sobre una propuesta de tregua de dos días en Gaza, e insistió en la frase que tanto han repetido el mandatario y su candidata, Kamala Harris, pero aún no se concreta en la realidad: «necesitamos un alto al fuego».

Recta final cargada de polémicas

A partir del lunes 28 de octubre la vicepresidenta se centrará en el norte, en el voto de los trabajadores y de una parte de la comunidad musulmana y árabe que se opone al apoyo estadounidense al genocidio israelí en Gaza y el Líbano.

Trump viajó a Georgia para reunirse con pastores y líderes religiosos y realizar un mitin en Atlanta, la capital de ese estado. El republicano ha tenido el apoyo de los cristianos evangélicos en sus campañas anteriores.

Medios resaltan la polémica que levantó el acto del candidato por el Partido Demócrata este domingo en el Madison Square Garden, cuando el comediante Tony Hinchcliffe insultó a la comunidad de latinos en ese país: “Ahora mismo hay una isla flotante de basura en medio del océano, creo que se llama Puerto Rico”, dijo en medio del mitin.

Lejos de disculparse, el comediante acusó a sus críticos en las redes sociales y les censuró por “no tener sentido del humor”.

Elló levantó viejas heridas, pues los puertorriqueños, a pesar de ser estadounidenses, no pueden votar en las elecciones presidenciales. Mas, huelga recordar que Pensilvania, estado electoral crucial, tiene medio millón de puertorriqueños. 

Mismo caso ocurre con los ciudadanos de territorios como las Islas Vírgenes, las Islas Marianas del Norte, Samoa Americana, Guam o las Islas Menores Periféricas, que solamente pueden ejercer el voto si residen en uno de los 50 estados de EE.UU. o en el Distrito de Columbia.

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